Estamos en crisis: es una afirmación con la cual parecemos estar de acuerdo en las diferentes esferas de lo humano entre las que se encuentran la academia y en ella, los centros y sujetos productores de conocimiento en salud. Está en crisis el sistema de seguridad social, las instituciones prestadoras de servicios, los programas de Medicina y otros afines a la salud. Está en crisis el ser humano que trasega por este entramado de relaciones, bien como usuario, como prestador de los servicios o como habitante de a pié en los lugares donde la vida y la muerte adquiere sus sentidos límite en la dinámica del mercado de la salud. Ante nuestros ojos se configuran constantemente múltiples contextos que emergen y se esconden según la capacidad de los observadores para aprehender con preguntas aquello que requiere ser estudiado para explicar o comprender las dinámicas en conflicto de y en la salud. Urge superar conceptos homogenizadores de los contextos como el de vida cotidiana, familia, comunidad, entre otros, con los cuales hemos pretendido explicar cómo el proceso saludenfermedad se gesta desde la intimidad de las familias en sus ambientes sociales y naturales; categorías preconcebidas desde teorías que se quedan cortas ante la complejidad de la realidad social.
2012-09-07 | 938 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 18 Núm.1. Junio 2012 Pags. 1-2 Rev Méd Risaralda 2012; 18(1)