Fragmento

Los terceros molares sólo se encuentran en la segunda dentición. Existen dos superiores y dos inferiores y en los cráneos de nuestros antepasados se encontraban erupcionados en su totalidad. Hoy en día es difícil que lleguen a erupcionar por completo, de manera que o están parcialmente erupcionados o están retenidos. A este respecto hay varias teorías que intentan explicar el porqué ya no erupcionan por completo. O bien se trata de que los huesos son más pequeños o se debe a que nuestra alimentación es a base de comida blanda. La realidad es que si no erupcionan de forma adecuada ocasionan en el paciente otros problemas como: a) reabsorción del diente adyacente, b) reabsorción ósea, c) formación de quistes, d) neuropatías del dentario inferior, e) infecciones que pueden ir desde la pericoronitis hasta una infección odontogénica más grave. En nuestros días es común observar a los jóvenes con dientes en malposición dentaria y con los terceros molares retenidos. Estas retenciones dentarias ocasionan sintomatología variada: 1) sensación de adormecimiento y tumefacción, 2) dolor leve o severo, 3) dificultad para deglutir, 4) dificultad para respirar, 5) trismus, etc. El tratamiento es la extracción por disección. Clasificación Existen varias y generalmente se rigen por los siguientes criterios: 1. Posición del tercer molar en relación con el segundo molar. 2. Características del espacio retromolar. 3. Ángulo del eje longitudinal del diente. 4. Cantidad de hueso o mucosa que recubre al diente. 5. Relación del tercer molar con la rama mandibular. Winter clasifica los terceros molares en relación a su posición con respecto al eje longitudinal del segundo molar en: • vertical • mesioangulado • distoangulado • horizontal • en linguoversión • en vestibuloversión • invertido

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2012-08-27   |   8,184 visitas   |   8 valoraciones

Vol. 8 Núm.90. Enero 2012 Pags. 8 Odont Moder 2012; 8(90)