Antecedentes: Existe controversia sobre el uso de los hemocultivos anaerobios para el diagnóstico de bacteriemia, por lo que es necesario conocer su verdadera utilidad desde un punto de vista práctico y económico. Material y métodos: Se presenta un estudio transversal, observacional, no aleatorizado, de muestras de hemocultivos pareados (aerobio y anaerobio) procesados entre junio de 2009 y diciembre de 2010. Se realizó un análisis para obtener proporciones e identificar diferencias en cuanto al uso de ambos métodos para el diagnóstico de bacteriemias, haciendo especial énfasis en el uso de hemocultivos anaerobios. Resultados: En total fueron 1,354 hemocultivos, 677 hemocultivos aerobios y 677 hemocultivos anaerobios. Del año 2009 fueron 460 hemocultivos, 230 para cada tipo, presentándose 199 (86.5%) aerobios sin crecimiento, y 31 (13.5%) con crecimiento; en tanto que los anaerobios fueron 224 (97.4%) negativos y 6 (2.6%) positivos. En el 2010, hubo un total de 894 hemocultivos, 447 aerobios y 447 anaerobios. De los aerobios 396 (88.6%) fueron negativos y 51 (11.4%) positivos, de los anaerobios 435 (97.3%) fueron negativos y sólo 12 (2.7%) positivos. Conclusión: El uso de la botella anaerobia se debe evitar como estudio de rutina. La incidencia de positividad a hemocultivos anaerobios es baja, siendo los aislamientos microorganismos facultativos que fueron aislados en un 98% en el hemocultivo aerobio.
Palabras clave: Hemocultivos bacteriemia bacteriemia por anaerobios.
2012-07-16 | 1,722 visitas | 1 valoraciones
Vol. 32 Núm.3. Julio-Septiembre 2012 Pags. 100-103 Enf Inf Microbiol 2012; 32(3)