Autor: Pradilla Ardila Gustavo
El 3 de diciembre se celebra en el continente americano un éxito mundial de la ciencia latinoamericana, cuando un modesto y paciente médico cubano hizo un descubrimiento que permitió erradicar una mortal enfermedad que todavía nos acecha en estos trópicos patrios. Corría el año de 1.900 y las tropas norteamericanas estacionadas en Cuba, luego de la Guerra Hispano-Norteamericana, enfrentaron un enemigo peor que lo españoles: la fiebre amarilla. Esta afección no tenía cura y mataba a miles de personas en Norte, Centro y Suramérica.
2012-03-10 | 421 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 42 Núm.3. Septiembre-Diciembre 2010 Pags. Salud UIS 2010; 42(3)