Autores: Motta Ramírez Gaspar Alberto, García Arayza Mayra Gabriela, Ortiz León Juan Luis, Castillo Lima José Arturo
Introducción: La tuberculosis pulmonar es la causa más habitual de lesiones en los lóbulos superiores y de lesiones cavitadas pulmonares. El establecimiento del diagnóstico de Tb es realizado frecuentemente en el primer nivel de atención condicionando la necesidad indispensable de la evaluación radiológica que facilita su identificación y el reconocimiento de manifestaciones radiológicas facilitando el diagnóstico y la instauración del tratamiento. Objetivo: Familiarizar al médico general con el patrón de imagen característico de la lesión cavernomatosa y el reafirmar los principios epidemiológicos y radiológicos que le permitan un abordaje diagnóstico y terapéutico inicial temprano y correcto. Material y métodos: Se realizó una revisión retrospectiva en el archivo radiológico de enseñanza de la UEM de aquellos casos en los que se identificó la imagen característica de la caverna incluyendo casos estudiados tanto con la telerradiografía de tórax (TTx) como con tomografía computada (TC). Los expedientes radiológicos del archivo tienen las solicitudes de los mismos y de donde se obtuvieron datos clínicos. La revisión incluyó la identificación de la lesión, si era única o múltiple, localización, dimensiones, nivel hidroaéreo, signos del aire creciente y del halo, afección parenquimatosa adyacente, evolución y seguimiento, así como la revisión de los diferentes métodos utilizados tales como la TTx, la tomografía lineal (TL) y/o la TC. Resultados: La revisión incluyó a 50 pacientes, 33 de ellos masculinos (66%) y 15 femeninos (34%). Las edades fluctuaron entre los 13 y 82 años de edad siendo la edad promedio de 50 años. En 29 (58%) casos se contó con la TTx, nueve de los cuales (31%) además tuvieron seguimiento y correlación con TC. De esa forma, tan sólo en nueve casos del total de los casos estudiados (18%) contaron con ambos estudios. En los 49 (99%) casos, las características de la lesión pulmonar permitieron establecer la caracterización de benignidad; en el único caso en el que se sospechó malignidad, no se cuenta con la comprobación ni el seguimiento. Se demostró lesión única en 32 (64%) de los casos y múltiples lesiones en 18 (36%) de los casos. De las lesiones múltiples, en dos casos (11%), se demostraron con ambos estudios (TTx y TC). En diez casos (56%) se identificaron con TC y seis casos (33%) con TTx. Además, se identificaron tres casos (6%: dos correspondientes a Tb y uno a aspergilosis) en los que existió hemoptisis masiva y ameritaron tratamiento con embolización por radiología invasiva. Conclusión: Aunque la TTx continúa siendo la técnica inicial de evaluación de la Tb pulmonar, la TC de tórax es útil al distinguir actividad o inactividad de la enfermedad, identificar áreas de consolidación, cavitación y diseminación broncogénica y miliar. La TC se recomienda cuando los hallazgos radiológicos son normales o no concluyentes y persiste la sospecha de Tb.
Palabras clave: Tuberculosis caberna aspergilosis broncopulmonar (ABP).
2008-11-21 | 6,604 visitas | 2 valoraciones
Vol. 62 Núm.4. Julio-Agosto 2008 Pags. 174-186 Rev Sanid Milit Mex 2008; 62(4)