Es sabido que la presión de pulso es una onda y que tiene velocidades mucho mayores que el flujo sanguíneo. Tales características son inherentes a la transmisión de energía vibratoria y obligan a la resonancia. Este fenómeno ha sido inadecuadamente entendido como el producto de la turbulencia del flujo sanguíneo y sin trascendencia en la patología circulatoria o aneurismática. La resonancia en el nuevo modelo se propone como generada por la presión de pulso, presentándose sobre segmentos predecibles como lo son las bifurcaciones y aneurismas, generando fuerzas muy intensas de elongación debidas a desacoplamientos vibratorios. Se implantaron 40 aneurismas en la aorta abdominal de ratas Wistar machos mediante técnicas microquirúrgica. Inmediatamente después se realizaron mediciones de la presión de pulso mediante cronómetro electrónico.
Palabras clave: Presión de pulso resonancia aneurismas ruptura.
2006-08-25 | 1,287 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 11 Núm.2. Abril-Junio 2006 Pags. 77-84 Arch Neurocien Mex 2006; 11(2)