Fragmento

El desarrollo pleno de las capacidades humanas para el trabajo, la educación y la cultura de un pueblo, sólo es posible cuando entre sus habitantes existen condiciones de salud adecuadas. Por ello, en México y muy en particular en Tabasco, a partir de la década pasada se vienen aplicando políticas de salud y seguridad social que han permitido modificar los patrones tradicionales de enfermedades presentes entre la población. Entre ellas, la estrategia de atención primaria a la salud, así como las políticas preventivas, de aumento de coberturas y de mejoras del nivel de vida de sus habitantes mediante la participación activa de la propia comunidad, son las que más han impactado en los niveles de salud y bienestar social de la población, contribuyendo a una disminución sensible en los niveles de morbilidad y mortalidad, así como al incremento en la esperanza de vida de la población en general. Sin embargo, es justo reconocer que si bien con el tiempo el Sistema Nacional de Salud ha alcanzado logros indiscutibles, es poco probable que bajo su forma tradicional de organización y operación pueda superar los rezagos acumulados en cobertura de servicios ofrecidos a población abierta, hacer frente a los nuevos retos en salud pública y atender el legítimo reclamo de los usuarios de que los servicios operen con mayor calidad y eficiencia. En consecuencia, en el Plan Nacional de Desarrollo 1995-2000 se impulsa la Reforma del Sistema Nacional de Salud, a efectos de hacer realidad el precepto constitucional que establece el derecho a la salud para todos los mexicanos.

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2004-05-20   |   1,762 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 3 Núm.1. Enero-Diciembre 1997 Pags. 204-206 Salud Tab 1997; 3(1)