Autor: Esquinca Cano Froilán
El progreso sustentable no es una meta tangible; por ello, no se puede cuantificar, su logro en determinado plazo resulta ser subjetivo. Es un concepto que implica al menos tres objetivos que entran en conflicto: los sociales, los ambientales y los económicos. La posibilidad de mantener estos factores en simetría, en el contexto del desarrollo humano, conlleva un pleno entendimiento del nivel civilizatorio, de vinculación al hábitat y de pertenencia territorial; así como, un equilibrio en la interacción de los espacios en que los humanos coinciden y comparten. Dicha relación no es permanente, sino que perdura dentro de una dinámica afectada por las constantes necesidades sociales de estos grupos que habitan territorios contiguos; muchas veces, con diferentes objetivos, escaseces y demandas.
2018-04-09 | 300 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 5 Núm.4. Octubre-Diciembre 2017 Pags. 242-247 Sal Chiap 2017; 5(4)