Autor: Collomb Sánchez Rosa María
En 1952 Zoll demostró que era posible estimular eléctricamente el corazón humano con un sistema de marcapaso externo. En 1956 descubrió que se podía suprimir la fibrilación ventricular aplicando una descarga sobre el tórax del paciente y restaurar el ritmo sinusal interrumpiendo la arritmia. En 1960, Kouenhoven demostró que era posible mantener un flujo sanguíneo sistémico suficiente, por un lapso determinado, mediante la compresión cardiaca externa. Existían entonces tres procedimientos fundamentales en el tratamiento de las urgencias cardiacas: El marcapaso, la desfibrilación y el masaje cardiaco externo. Day, observó que la mayor parte de las veces el paciente estaba solo en el momento del paro y el retraso con que se aplicaba el masaje, lo hacía un fracaso con mucha frecuencia. Entre 1962 y 1963 fue cuando se conjugaron los objetivos de los cuidados intensivos coronarios: la reanimación cardiovascular y el conocimiento de las causas de muerte durante el infarto agudo del miocardio (IAM). Estos hechos hicieron que se abrieran las primeras unidades coronarias en el mundo; Meltzer, en el Hospital Presbiteriano de Filadelfia, EUA, Brown en el Hospital General de Toronto, Canadá y Day en Betania, Kansas, EUA.
2004-08-11 | 4,056 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 4 Núm.2. Abril-Junio 1996 Pags. 54-56 Rev Mex Enfer Cardiol 1996; 4(2)